
La Voz de las Sombras
Enacar, entre el cielo y el infierno
12 March 2025 | 11:19
hrs
En un mundo en constante cambio, el aprendizaje continuo es clave para el desarrollo personal y profesional. La población mundial envejece rápidamente, lo que plantea nuevos desafíos que requieren habilidades actualizadas. El envejecimiento no implica una desconexión cognitiva, sino nuevas oportunidades para mantener a los mayores activos en la sociedad. Para explorar estos beneficios, hablamos con Cecilia Cisterna, directora de la Escuela EDHUARTE.
Desarrollado por Bío Bío ComunicacionesEstudios recientes han demostrado que las personas mayores que participan en actividades de aprendizaje a lo largo de su vida experimentan beneficios significativos en términos de salud mental, incluyendo la reducción del riesgo de demencia y otras enfermedades cognitivas.
En un mundo en constante cambio, donde los avances tecnológicos y las nuevas demandas laborales surgen a diario, el aprendizaje continuo se ha convertido en una herramienta esencial para el desarrollo personal y profesional.
Esta necesidad se ve aún más acentuada en el contexto actual, donde la población mundial está envejeciendo a un ritmo acelerado y, con ello, surgen nuevos desafíos que requieren de habilidades y conocimientos actualizados.
En particular, el envejecimiento de la población ha demostrado ser un fenómeno que, lejos de significar una desconexión o ralentización de las capacidades cognitivas, ha abierto nuevas oportunidades para mantener a las personas mayores activas y comprometidas en la sociedad.
Por ello, para abordar los beneficios cognitivos, emocionales y sociales que conlleva el mantenerse activo en el aprendizaje, conversamos con Cecilia Cisterna, académica y directora de la Escuela EDHUARTE.