Indagan fatal accidente ocurrido la noche del miércoles en el Puente Llacolén

Fue un violento accidente de tránsito, que se registró la noche de ayer -miércoles- en el concurrido Puente Llacolén. Dos vehículos colisionaron de manera frontal y el desenlace fue fatal: dos adultos y dos niños muertos.

Eran pasadas las 21:00 horas, cuando un bus de la empresa Eme Bus, que trasladaba a 25 personas en su interior, y un vehículo SUV, con los cuatro integrantes de una familia, chocaron a alta energía.

El Puente Llacolén conecta las comunas de San Pedro de la Paz y Concepción y, de acuerdo a lo establecido, en aquel viaducto la velocidad máxima permitida es de 60 Km/h.

Hipótesis iniciales tras tragedia

Pero, ¿por qué ocurrió esta tragedia? Algunas hipótesis se barajan. La Sección de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT) de Carabineros es la encargada de establecer las causas basales del hecho que dejó varios heridos y cuatro muertos.

No obstante, son tres las posibles explicaciones que asoman. La primera de ellas es un adelantamiento indebido y la segunda, exceso de velocidad por parte de ambos vehículos involucrados.

Una tercera hipótesis que se está investigando es la posibilidad que el hecho haya sido intencional, es decir, que el vehículo menor haya impactado al bus. Sin embargo, desde el Gobierno, a través del delegado Presidencial Eduardo Pacheco, llamaron a esperar los peritajes oficiales.

Pero, a pesar de ello, de lo que sí se tiene certeza es que el bus iba en dirección a San Pedro de la Paz, mientras que el automóvil -Hyundai Tucson negro- iba hacia Concepción y debido a la nula división entre vías, este último salió de su carril.

Toda una familia muerta tras accidente

Las primeras unidades de emergencia comenzaron a llegar al viaducto y se encontraron con un triste escenario.

Un auto totalmente destruido, partes de ambos móviles distribuidos por el piso, dejando un rastro de la alta energía liberada en el choque, y pasajeros mirando atónitos la situación.

De manera casi inmediata se informó que todos los ocupantes del auto negro habían muerto, correspondiente a dos adultos y dos niños.

Durante la jornada de este jueves se confirmó que aquellos integrantes componían una joven familia que residía en San Pedro de la Paz.

Se trata de Cristian Bouniot Baeza de 37 años y Patricia Alarcón Matamala, de 38. Además de los dos hijos de ambas víctimas, quienes tenían 12 y 5 años.

Chofer del bus fuera de riesgo vital

Desde el otro lado, un bus provenía desde la comuna de Estación Central, con destino final en Lota, Región del Biobío.

A bordo de la máquina, perteneciente a la empresa Eme Bus, iban 23 pasajeros junto con dos trabajadores de la línea.

De ellos, 6 debieron ser trasladados hasta el Hospital Regional de Concepción con lesiones de diversa gravedad, pero ninguno en riego vital.

Por otra parte, el conductor del bus tuvo que ser rescatado por equipos de emergencia luego de quedar atrapado.

Lo que se conoce hasta el momento es que este último se encuentra fuera de riesgo vital, pero con lesiones graves: fracturas en las piernas y daño en órganos internos.

El director del Hospital Regional, Claudio Baeza, entregó el detalle del estado del conductor y comentó que no tiene lesiones vasculares aparentes, además de detallar que hoy ingresará a pabellón.

Un puente sin barreras

Desde su construcción en 1999 y hasta 2010, el Puente Llacolén contaba con barreras new yersey. Básicamente, se trataba de bloques de hormigón ubicados en el centro de la pista para evitar que vehículos traspasaran su carril.

Sin embargo, estas fueron retiradas posterior al terremoto del 27 de febrero de 2010, que afectó a gran parte de la zona centro-sur de Chile, ya que el puente debía tener menos peso para seguir operando.

Tras este último accidente, el delegado Eduardo Pacheco dijo que ya pidió una reunión con el Ministerio de Obras Públicas (MOP) y Vialidad para explorar cuáles son las alternativas para instalar nuevamente algún tipo de barrera o medida de seguridad en el viaducto.

Por su parte, desde el MOP afirmaron que -tras el mencionado movimiento telúrico- se tomaron otras medidas de seguridad, como reducir la velocidad máxima permitida de 80 a 60 kilómetros por hora.

Hasta este jueves por la tarde, los cuerpos de las víctimas del accidente que enlutó al Gran Concepción aún no eran entregados a sus familiares.

De igual manera, los colegios Amanecer San Carlos y Galvarino, donde asistían los menores de edad, comunicaron sobre los fallecimientos y enviaron sus condolencias. A esto último, también se sumó la Municipalidad de San Pedro de la Paz, a través de su dirección de Educación Municipal.

Una nueva tragedia vial, que rememora a lo ocurrido el sábado en la autopista del Itata, cuando otra colisión frontal cobró la vida de cinco personas. Otra vía que no cuenta con barreras centrales en la totalidad de su extensión.