Una cárcel de alta seguridad en Isla Mocha fue la propuesta de la diputada por la región del Biobío, Karen Medina. Hecho que habitantes rechazaron rotundamente.
La idea surgió por la ubicación geográfica de la isla, según la diputada, “su distancia del continente minimiza el riesgo de fugas o intentos de escape (…)"
Asimismo, añadió que “el proyecto no solo contribuirá a descongestionar el sistema penitenciario en el continente, sino que también proporcionará una solución integral para mejorar las condiciones de vida de los habitantes de la Isla Mocha”.
Sin embargo, esta propuesta no les pareció a los habitantes de la isla.