Entrevista de Tomás Mosciatti a Mario Waissbluth: "La Dipres es la autora de la 'dipresiación' del Estado"

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En una nueva edición de La entrevista de Tomás Mosciatti, conversamos con el fundador e investigador del Centro de Sistemas Públicos del Departamento de Ingeniería de la Universidad de Chile, Mario Waissbluth, quien realizó una profunda reflexión sobre la situación del Estado chileno, desde 1990 hasta la fecha, destacando los logros, las falencias y los desafíos pendientes. En su análisis, subraya cómo el país ha experimentado avances significativos en términos de indicadores económicos, reducción de la pobreza y mejoras en áreas como la salud y la infraestructura. Sin embargo, también destaca problemas graves como la caída en la productividad, la baja natalidad y el aumento de la delincuencia.

Waissbluth señala que el Estado a pesar de ser eficiente en términos de gasto público (comparado con otros países de la OCDE), enfrenta grandes desafíos de eficacia. Si bien el gasto se ha manejado de manera austera, la falta de visión a largo plazo y la falta de una planificación coherente son puntos críticos que han afectado la capacidad del Estado para ofrecer resultados más efectivos a sus ciudadanos.

Uno de los principales problemas que menciona Waissbluth es la falta de una visión de futuro consensuada entre las fuerzas políticas del país. Para él, esto ha llevado al Estado a dar bandazos, cambiando de dirección de acuerdo con los vaivenes políticos y sin un plan claro para el futuro.

Por otro lado, Waissbluth aborda varios problemas estructurales y operativos dentro del Estado, tales como la permisología y la burocracia. En su opinión, las reformas propuestas por el gobierno, aunque modestas, no van lo suficientemente lejos en la eliminación de trabas administrativas y en la mejora de la eficiencia de los procesos públicos. Además, subraya la necesidad urgente de fortalecer la Alta Dirección Pública, tanto en número como en calidad, para asegurar un mejor funcionamiento de las instituciones del Estado.

En cuanto a la descentralización, también señala que hay problemas graves, especialmente en términos de recursos humanos en las regiones, lo que afecta la capacidad de los gobiernos regionales para gestionar eficientemente los recursos y llevar a cabo proyectos de desarrollo. La corrupción también se menciona como un problema relevante, aunque no exclusivo de un partido político.

Finalmente, Waissbluth hace un llamado a la necesidad de reformas más profundas en áreas clave del Estado, como la Dirección de Presupuestos (DIPRES), que, según él, se ha quedado atrás en términos de modernización y eficiencia. Señala que una evaluación externa e internacional podría ayudar a mejorar su funcionamiento, además de sugerir reformas en los incentivos para los funcionarios públicos, que actualmente se centran en bonos ligados a indicadores que no siempre son efectivos.