El sindicato de trabajadores de la Corporación Teatro Regional del Biobío (TBB) solicitó al gobernador Rodrigo Díaz reintegrar a la presidenta del directorio, Bernardita Neira, quien fue removida de manera sorpresiva junto al vicepresidente, dos años ante de terminar su periodo.
La decisión, comunicada el jueves por el Gobierno Regional y la Corporación TBB, fue sorpresiva y justificada por el Gore en el desafío de dar continuidad a la promoción de la cultura y las artes en la región, no obstante, destaca que tanto la presidenta Bernardita Neira como el vicepresidente Octavio Enríquez tuvieron una labor destacada y dejaron un legado invaluable.
La directiva de los trabajadores del Teatro emitió un comunicado en que señalan comprender las atribuciones que el cargo le facultan al gobernador Rodrigo Díaz, por lo que hicieron entrega de una carta en que le piden reconsiderar su decisión.
Diego Bascuñán, presidente del sindicato, recordó que una serie de acontecimientos desestabilizaron hace un tiempo el liderazgo corporativo del Teatro, afectando profundamente a los trabajadores.
“Con la llegada de la señora Bernardita Neira como presidente del directorio, hemos vivido un período de tranquilidad y respeto hacia los trabajadores y trabajadoras, lo cual no fue así anteriormente. Es por eso que como sindicato tenemos que garantizar los derechos de nuestros compañeros, por lo anterior es que hemos enviado una carta para el gobernador para que reconsidere su decisión y reintegre la señorita Bernardita Neira”, dijo Bascuñan.
Agregó el dirigente que ven con preocupación que la continuidad de este trabajo se pierda en este nuevo proceso, y destacó los buenos resultados que ha tenido la Corporación, reflejados entre otros en la última versión del festival REC.
La presidenta saliente Bernardita Neira, se refirió al trabajo en desarrollo que estaban realizando y que tiene que ver con la cohesión del gobierno corporativo.
“Nuestro período terminaba en 2025 y queríamos dejar pavimentado concretamente el camino hacia un gobierno corporativo maduro. Con el modelo prevención del delito completamente implementado y caminando. También con medidas de gestión de riesgo y de control para poder aumentar y mantener la confianza de los grupos de interés en la Corporación”, destacó.
El TBB cuenta con 40 trabajadores, de los cuales siete son jefatura. De los 33 restantes, 30 pertenecen al sindicato, que con la carta presentada a fines de la semana, confirmó que no apoya el descabezamiento de la mesa directiva.
Los tres representantes que tenía el gobierno regional en el directorio y que fueron removidos, su suma a la salida de los otros dos que ya habían dejado de cumplir ese rol. Los cinco deben ser reemplazados en los próximos días, decisión que debe ser ratificada por el Consejo Regional.
